Seis beneficios de ir a un campamento de verano
Durante generaciones, los niños han pasado los veranos de día y campamentos para dormir, probando nuevas actividades como la natación, el senderismo y varios deportes. Pero lo que muchas familias pueden no darse cuenta es que el campamento brinda a los niños diferentes oportunidades para desarrollar importantes habilidades para la vida que son difíciles de lograr en cualquier otro entorno. A continuación se presentan algunos de los muchos beneficios que sus hijos obtendrán de la experiencia del campamento de verano.
Beneficios del campamento de verano
1) Los campistas obtienen las habilidades para la vida necesarias para convertirse en adultos exitosos.
En el campamento, los niños adquieren valiosas habilidades para la vida, lo que los beneficia. De hecho, una organización llamada The Partnership for 21st Century Skills (que comprende un grupo de empresas, líderes educativos y legisladores) descubrió que existe una gran brecha entre el conocimiento que los estudiantes aprenden en la escuela y las habilidades que necesitan para tener éxito en el siglo XXI. siglo. Después de una extensa investigación, la organización determinó que algunas de las habilidades necesarias para convertirse en adultos exitosos son la comunicación, la colaboración, la creatividad, el liderazgo, la socialización y la resolución de problemas. Todas estas áreas se fomentan en el entorno del campamento.
Los campistas siempre se comunican entre sí, ya sea en el campo o en la litera, aprendiendo a trabajar juntos como equipo y como parte de la comunidad del campamento. También llegan a ser líderes en el campamento, ya sea guiando a un campista más joven por primera vez o administrando su equipo olímpico de campamento. Los campistas aprenden a navegar por su cuenta y resolver problemas por sí mismos. También participan en muchos medios creativos.
2) El campamento educa al niño en su totalidad.
Hay más en el aprendizaje que tomar exámenes y obtener buenas calificaciones. El campamento ofrece uno de los entornos de aprendizaje más poderosos y puede ser un lugar donde se lleva a cabo la educación social de un niño. Brinda a los niños la oportunidad de probar nuevas actividades. Cuando los niños tienen éxito en estas actividades, desarrollan su autoestima. Los niños también desarrollan habilidades sociales y de resolución de problemas siendo parte de una comunidad de apoyo y participando juntos en actividades. Los campistas son desafiados y alentados a crecer todos los días, lo que los beneficia.
3) El campamento permite que los niños se desconecten de la tecnología.
Los niños de hoy pasan más de 7,5 horas al día interactuando con la tecnología, que a menudo reemplaza las actividades prácticas vitales y las oportunidades de socialización. La mayoría de los campamentos de verano prohíben la mayoría de la tecnología, incluida la televisión, los teléfonos inteligentes, las tabletas y las computadoras personales. Tomarse un descanso de la tecnología durante el verano permite que los niños se comuniquen cara a cara.
4) En el campamento, hay mucho tiempo para jugar, lo que ayuda a los niños con el desarrollo social y emocional.
Equilibrar los horarios escolares, la tarea y las actividades extracurriculares no deja mucho espacio para jugar. La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) informa que el juego libre y no estructurado es saludable y esencial para ayudar a los niños a alcanzar importantes hitos del desarrollo social, emocional y cognitivo. También ayuda a los niños a manejar el estrés. Los campamentos de verano tradicionales brindan a los niños mucho tiempo para jugar, lo que conduce a un desarrollo emocional y social saludable.
5) Los niños pueden reinventarse en el campamento.
Los estudiantes a menudo asisten a la escuela año tras año con los mismos compañeros, lo que puede llevar a etiquetarlos y quedarse “atrapados” con una percepción particular. Un niño puede llegar a ser conocido como estudioso, callado, etc., cuando, en realidad, puede ser bullicioso en otro ambiente. Los niños que van a campamentos diurnos o nocturnos se encuentran con otro grupo de personas en un entorno diferente. Muchas veces, un niño saldrá de su supuesta categorización si se le da la oportunidad. Los niños pueden reinventarse en el campamento y ser quienes realmente quieren ser, lo que los beneficia al generar confianza.
6) El campamento promueve la independencia.
Cuando los niños van al campamento, se les da la oportunidad de crecer más independientes. Ya sea por un día o por todo un verano, la separación de los padres significa que un campista tiene que aprender a confiar en sí mismo y en otros adultos y compañeros de confianza. La separación de los padres le da al niño la capacidad de pensar de forma independiente, lo que aumenta la autoestima.
Fuente: Noticias de la guía para padres